LA EDUCACIÓN AMBIENTAL Y LA PREVENCIÓN DEL DAÑO, CLAVES EN EL TRATAMIENTO DE LOS RESIDUOS

El martes 5 de junio se llevó a cabo la 13era clase del 2do Curso de Práctica Profesional a cargo de la abogada Martina Erostegui, la temática abordada fue “Residuos peligrosos y su trazabilidad”. Asistieron Operadores del Derecho y docentes del ámbito universitario, dada la importancia de la temática. En Argentina rige la Ley 24.051 de Residuos Peligrosos, la primera norma en legislar sobre la temática; uno de sus artículos  invita a las provincias a adherirse, por ello muchas legislaciones locales se sumaron. Sin embargo lo más importante de la norma, es la salud, el bien jurídico protegido junto con el derecho a un medioambiente sano, establecido en el artículo 41 de la Constitución Nacional luego de la reforma de 1994.

De esta forma la normativa en Argentina se rige bajo el aforismo que los residuos peligrosos son responsabilidad del generador en el ámbito de la industria. “Por eso se habla de la trazabilidad que tienen los residuos. Esto quiere decir que tanto el generador, el transportista como el operador del residuo tienen que estar debidamente acreditados para realizar esta tarea” explica la abogada e incorpora en la lista, los sitios de acopio y las tecnologías a utilizar en la tarea.

Los residuos industriales en Argentina se clasifican según su peligrosidad o la potencialidad de causar un daño a futuro. Es por ello que los sitios de acopio son importantes dado que existen residuos que son incompatibles entre sí, por lo cual es importante el orden en el almacenamiento  y también la documentación del recorrido. “La cuestión documental está expuesta en un libro que tiene el generador (empresas/industrias), donde va volcando toda la información y respondiendo a kilos de residuos, a qué corriente pertenecen (según sus habilitaciones), quienes lo transportan y quien será el operador. El transportista y el operador tienen que estar habilitados como también la tecnología que se utilice,  de eso se trata la trazabilidad y fue el  objetivo de la charla. Este es un esquema básico de control, que lo tienen la mayoría de las legislaciones, que tratan sobre residuos industriales” expresó la Dra. Erostegui.

La legislación Argentina en comparación con otros países.

Argentina se encuentra subscripta a varios de los tratados internacionales a los cuales  muchas potencias extranjeras aún no han subscripto. Esto significa “que tenemos un grado de compromiso importante, lo hemos incorporado en la Constitución. Sin embargo todavía hay mucho trabajo por hacer, porque existe  falta de desarrollo en las tecnologías de tratamiento de residuos en Argentina, que en comparación con otros países se encuentra muy atrasado” manifestó. Durante la clase ejemplificó que España y Alemania tienen la cultura del reciclado, que Argentina aún debe trabajar. En definitiva, aunque los residuos peligrosos que provienen de la industria tengan todo un mecanismo de control, el gran desafío son los residuos sólidos urbanos (residuos domiciliarios). “Si bien hay normativas abundantes sobre el tema, lo que falla es la educación ambiental para tener mejores resultados” manifestó la Dra. Erostegui.

Sobre este tema planteó, “generalmente se cree que debe haber un régimen de incentivos, cuando el mayor incentivo debería ser la preservación de la salud en general” aseguró, haciendo referencia a la falta de conciencia por parte de la gente. “Tal vez los sistemas han quedado obsoletos, el pilar que está faltando es el pilar constitucional de la Educación Ambiental. Si eso existiera no nos haríamos tantas preguntas sobre los incentivos o sobre los castigos, sino que directamente tendríamos el hábito de la clasificación, desde el punto de vista de la salud y del cuidado del ambiente”.

“Falla la cultura del reciclaje”

La Dra. Martina Erostegui recorrió un largo camino en la temática de residuos industriales, los que deben responder al proceso de trazabilidad, es por ello que busca la concientización sobre los residuos, teniendo en cuenta los  puntos que plantea la Constitución Nacional. La educación ambiental y la prevención del daño forman parte de la normativa ambiental y hoy forman parte del CCyC “Pero nos falla la cultura del reciclaje” aseguró la Dra. Erostegui.  Esto  genera daños en distintos lugares del mundo y permite en algunos casos el daño colectivo; se necesita el conocimiento sobre el derecho ambiental.

Marcando la diferencia entre la responsabilidad de las industrias con los residuos peligrosos y la responsabilidad de los ciudadanos con sus residuos, la abogada expresó la falta de educación ambiental y su relación con la contaminación.  “Por ejemplo, cuando desechamos líquidos cloacales en el mar, generamos toda una cadena de consecuencias que tal vez no se vislumbra en forma individual, pero que está causando un daño colectivo y a largo plazo”.  Desde esta perspectiva, la falta de educación ambiental se relaciona con la falta de reclamo de la comunidad sobre un daño colectivo que se está produciendo.  “Si yo fomento un basural clandestino tal vez se pueda sanear pero que nunca vuelve a su estado original, se pierde la calidad del suelo, su capacidad productiva, la posibilidad de asentar viviendas. Por eso es importante el cuidado y la toma de conciencia” expresó.

Aunque desde la comunidad es posible realizar acciones que soliciten el cese de determinada actividad, que sea potencial o actual, no siempre la gente realiza los reclamos. “Es bastante interesante la cuestión comunitaria de las vecinales que receptan estos reclamos que después por medio de ellos se hacen presentaciones. También hay mecanismos judiciales o administrativos para solicitar el cese de determinadas acciones, pero los autores son desconocidos,  es difícil multar administrativamente o iniciar un proceso por daños, porque no se sabe quién fue, como los basurales clandestinos. No hay una policía ambiental, por eso es muy importante la educación ambiental y la toma de conciencia” sentenció la abogada.

Antes de culminar indicó que existen distintos mecanismos de incentivar a las personas “y una de ellas es la instalación de los iglúes verdes,  la gente cada vez responde más;  quiere decir que cuando hay opción para reciclar la gente lo hace” expresó.